Oh! dios de los Cotswolds que moras en sus bosques y praderas
replandeces en contraluces y amplias gamas de matices y colores
que resuenas en mis memorias de poetas y pintores, permite te capte a plenitud.
Que deseche toda tentación de buscarte en vano en iglesias y religiones estériles
y sobre todo, que me invites a presenciarte en otras venideras estaciones.
RBD
Meditaciones Perdidas en el Tiempo
X, 2012